En respuesta al alarmante aumento de personas que cruzan la frontera de Estados Unidos sin ser detectadas, el presidente Joe Biden tiene previsto solicitar al Congreso una asignación presupuestaria de 14 mil millones de dólares para reforzar la seguridad fronteriza. Esta solicitud se enmarca dentro de una petición presupuestaria de 105 mil millones de dólares destinada a abordar las «necesidades de seguridad nacional» del país.
A pesar de que el presidente Biden no mencionó directamente la situación en la frontera sur durante su reciente discurso desde la Oficina Oval, los informes indican que parte de los fondos solicitados estarán destinados a la protección fronteriza.
Sin embargo, algunos legisladores han expresado su preocupación de que estos fondos no se utilicen efectivamente para fortalecer la seguridad en la frontera.
El senador Kevin Cramer (R-ND) ha instado a que cualquier financiamiento destinado a la frontera esté diseñado específicamente para asegurarla y no para facilitar el cruce ilegal de personas. A su vez, el senador Chris Murphy (D-Conn.) sugirió que las asignaciones del Congreso deberían dirigirse a los costos indirectos asociados con la supervisión de la línea fronteriza entre Estados Unidos y México.
Desde que Biden asumió el cargo en 2021, aproximadamente 3.8 millones de personas han ingresado a Estados Unidos a través de sus fronteras, de las cuales casi la mitad ingresaron ilegalmente y nunca fueron detenidas.
Los «gotaways», es decir, migrantes que cruzan la frontera sin ser detectados, han estado en aumento constante desde la investidura del presidente. En lo que va del año hasta mayo de 2023, se estima que al menos 530,000 personas realizaron esta travesía sin ser capturadas, una cifra cercana al récord histórico de 600,000 reportado por el Departamento de Seguridad Nacional en 2022.