Saleh al-Arouri, el número 2 de Hamás en el extranjero, perdió la vida en un ataque con drones perpetrado por Israel en el barrio de Dahiyeh, en Beirut, Líbano. La información fue confirmada por un portavoz del grupo terrorista Hezbollah.
A sus 57 años y residente en Líbano, al-Arouri ostentaba el cargo de jefe adjunto de la facción política de Hamás, siendo considerado el líder de facto de la facción más sanguinaria del grupo en Cisjordania. Se le atribuyen no solo actividades políticas sino también la planificación de diversos actos terroristas, incluido el secuestro y asesinato de tres adolescentes israelíes en junio de 2014.
Con antecedentes penales en cárceles israelíes, al-Arouri fue liberado en 2010 como parte de un intercambio de prisioneros por Gilad Shalit, cabo de las FDI secuestrado por Hamás en 2006. Tras un breve periodo en Estambul, se mudó a Siria y finalmente estableció residencia en Beirut, desde donde dirigía operaciones militares en Cisjordania.
Se destacó por su estrecha relación con Irán y Hezbollah en Líbano, siendo uno de los principales intermediarios entre Hamás e estos grupos. En Beirut, al-Arouri formó una fuerza local de Hamás con activistas de campos de refugiados libaneses, dotándola de entrenamiento militar y un modesto arsenal de cohetes.
El periplo de al-Arouri incluyó una etapa en Siria antes de asentarse definitivamente en Beirut. Durante su tiempo en la capital libanesa, coordinó actividades terroristas, organizó transferencias de fondos para atentados y mantuvo vínculos estrechos con las redes de Hamás y Hezbollah.