julio 7, 2024

Una pareja de Pensilvania se enfrenta a una serie de cargos tras el descubrimiento de un adolescente y 77 animales en condiciones deplorables en su hogar. Agentes humanitarios y policías ejecutaron una orden de registro en la residencia del condado de Westmoreland, vinculada a James Chaney, de 52 años, y Kathleen Chaney, de 59, el 14 de agosto, según informó el Penn-Trafford Star citando documentos judiciales.

El registro reveló un escenario impactante: un niño de 14 años vivía en la casa junto con 46 perros, 23 gatos, cinco cobayas, una chinchilla y un hurón. La esposa, Kathleen Chaney, estaba ausente durante la intervención policial y se negó a regresar a casa, aunque admitió que el adolescente era su hijo y que ambos cuidaban animales.

El interior de la casa estaba manchado de heces y otra suciedad, y la casa no tenía agua corriente.



Las condiciones dentro de la residencia eran espantosas, con olores abrumadores a heces, orina y aguas residuales. El informe también destacó la presencia de moho y telarañas en las habitaciones, mientras que el olor a amoníaco dificultó la inspección para los investigadores.

El sargento de Penn Township, Robert Broome, expresó en documentos judiciales que estas condiciones eran las peores que había experimentado en sus 15 años como agente del orden y más de 20 años como socorrista. Añadió que estaba claro que estas condiciones se habían mantenido durante un largo período.

El vecino, Bill Monstrola, alertó a las autoridades sobre la situación, describiendo condiciones deplorables y maltrato animal recurrente, incluyendo animales expuestos a temperaturas extremas sin refugio adecuado.

Todos los perros y gatos rescatados presentaban condiciones preocupantes, desde pulgas y gusanos hasta lesiones graves, infecciones y úlceras en los ojos. Algunos animales tenían lesiones provocadas, como un perro con el útero roto y otro al que le clavaron una aguja en el área del estómago.

Las autoridades encontraron a un adolescente y 77 animales languideciendo en la casa en ruinas llena de aguas residuales.



Las autoridades también encontraron animales muertos en el lugar, incluyendo un perro, un pájaro, una serpiente y cuatro gallinas. Jen Johnson, rescatadora de animales, describió la escena como desgarradora, con animales atados y encerrados en jaulas tanto dentro como fuera de la casa.

Después de la redada, cinco perros y nueve gatos aún esperan adopción, mientras que otros cuatro gatos reciben tratamiento médico.

La semana pasada, James y Kathleen fueron acusados de 22 cargos, incluyendo poner en peligro el bienestar de los niños y abuso y negligencia animal. Hasta el momento, no han sido procesados según registros judiciales.