diciembre 5, 2024
1000053681

El intérprete era también socorrista y apareció en 150 episodios de la exitosa serie de los 90; hace casi dos décadas se le había diagnosticado la enfermedad de Parkinson.

Michael Newman, actor de la exitosa serie Baywatchmurió el pasado fin de semana a los 67 años tras sufrir una serie de complicaciones cardíacas después de enfrentar durante casi dos décadas la enfermedad de Parkinson.

La noticia fue confirmada por su amigo Matt Felker, quien dirigió el documental After Baywatch: Moment in the sun. Según indicó, el actor murió rodeado de su familia y afectos, dejando un legado tanto en el mundo de la actuación como en el ámbito de la lucha contra el Parkinson.

Nacido en Los Ángeles, el artista se destacó por interpretar a Mike “Newmie” Newman, uno de los socorristas más populares de Baywatch. La impronta de autenticidad que trasladó a su personaje era innegable, ya que además de ser actor era un socorrista con años de experiencia en la vida real. De hecho, fue el único miembro del elenco que llegó a contar con esta experiencia profesional, lo que le permitió añadir un nivel extra de realismo a su papel.

A lo largo de la serie, apareció en 150 episodios, superado únicamente por el actor David Hasselhoff, quien interpretaba al icónico Mitch Buchannon. La ficción, que se emitió entre 1989 y 2001, se convirtió en un fenómeno mundial, y el personaje de Newman llegó a ser uno de los favoritos del público. Baywatch, cuyo elenco se completaba con nombres como Pamela Anderson, Nicole Eggert, Yasmine Bleeth y Jeremy Jackson, narraba las historias de un equipo de salvavidas que no solo realizaba labores de rescate en las playas sino que también luchaba contra el crimen, en medio de diversas tramas personales.

Aunque alcanzó la fama gracias a la serie, la vida de Michael estuvo ligada a una vocación de servicio. A la par de su carrera televisiva, el artista trabajaba como bombero y mantuvo esa ocupación a tiempo completo mientras grababa la serie. Cuando el programa terminó, continuó desempeñándose en el cuerpo hasta su jubilación, completando 25 años de servicio.

La vocación por salvar vidas y ayudar a los demás también se reflejó en los últimos años de su vida, cuando se dedicó a recaudar fondos para la Fundación de Michael J. Fox, organización que trabaja para encontrar una cura para el Parkinson, enfermedad que a Newman le fue diagnosticada en 2006, cuando tenía 50 años.

En una entrevista con la revista People, en agosto de este año, el actor expresó su deseo de poder ayudar a generar una mayor conciencia sobre la importancia de encontrar una cura para la enfermedad. “Esta dolencia terminal me ha permitido pensar mucho, algo que quizás no quería, y me ha aportado sabiduría”, llegó a decir.

Aunque su diagnóstico cambió su vida de manera radical, el actor mantenía una actitud positiva. “Aprecio mucho los días en que puedo estar en esta tierra con mi familia y mis amigos”, dijo al mismo medio. Newman tuvo que adaptar su vida a las condiciones que le impuso la enfermedad.

En el documental After Baywatch: Moment in the sun, Newman habla abiertamente sobre los desafíos con los que llegó a lidiar diariamente, incluyendo la necesidad de tomar diez medicamentos al día y la constante sensación de ansiedad que le generaba su situación. Aunque el Parkinson avanzaba lentamente, él sentía cómo esta condición iba transformando su cuerpo.

El actor aprovechó la oportunidad que le brindó el documental para hablar de su lucha y su determinación por seguir adelante. “Contar mi historia significa mucho para mí”, afirma en la película.

Newman llevaba 36 años de matrimonio con Sarah, madre de sus hijos Chris y Emily. Antes de recibir el diagnóstico, el actor había planeado retirarse con su esposa en Hawaii y la pareja llegó a construir su casa soñada a solo dos cuadras de donde se filmó el spin-off Baywatch: Hawaii.

Sus últimos años estuvieron marcados por la lucha contra el Parkinson. En una entrevista en 2023, contó cómo fue enfrentarse a esta realidad después de que en 2006 su esposa notara sus primeros temblores en sus movimientos y que había comenzado a caminar de manera extraña. “Todo cambió a partir de ese momento”, le contó Newman a People. “Todas esas cosas que pensaba que iba a hacer con mis hijos y nietos, las fotos que iba a tomar, todos los planes que tenía… Se terminaron”, explicó.

(La Nación)