El informe anual de 2023 de Transparencia Internacional (TI) ha revelado que Venezuela se sitúa como el país más corrupto de América por décimo año consecutivo, obteniendo solo 13 puntos en el Índice de Percepción de la Corrupción (IPC) en el sector público, en una escala que va de cero (muy corrupto) a 100 (muy baja corrupción). Esta puntuación coloca a Venezuela como el segundo país más corrupto del mundo, solo superado por Somalia a nivel global.
Según el informe, en Venezuela se ha malversado sistemáticamente miles de millones de dólares de dinero público, beneficiando a unos pocos individuos poderosos y exacerbando la pobreza y la desigualdad. La corrupción en el país se manifiesta a través de grandes esquemas que van de la mano con la captura de los sistemas legislativo, regulatorio y judicial por parte de funcionarios de alto nivel, con el fin de generar poder y evadir el castigo.
Además, se destaca que el pago de sobornos y la cooptación de jueces y fiscales en todos los niveles del sistema de justicia se ha convertido en uno de los principales mecanismos utilizados por las redes delictivas para asegurar la continuidad de sus actividades ilícitas, así como su impunidad.
En contraste, a nivel mundial, países como Dinamarca, Finlandia y Nueva Zelanda muestran una menor percepción de corrupción, con puntuaciones significativamente más altas en el IPC.
Fuente: DW