
Las intensas lluvias que cayeron este viernes en la ciudad argentina de Bahía Blanca, a unos 600 km al sur de de Buenos Aires, causaron la muerte de al menos 13 personas y graves inundaciones.
La ciudad de 350.000 habitantes recibió más de 300 milímetros de lluvia en un lapso de seis horas, cantidad que es la mitad de toda la lluvia que suele caer en un año.

Esto causó inundaciones repentinas en las calles de Bahía Blanca, que arrastraron vehículos, mobiliario urbano y escombros de viviendas que no soportaron el embate de las aguas.
Las autoridades informaron de la muerte de al menos 13 personas, pero se teme que el número se incremente a medida que el nivel del agua empiece a bajar y los equipos de emergencia puedan acceder a los lugares afectados.
El gobierno de la provincia de Buenos Aires calificó el fenómeno como una auténtica catástrofe natural. Ante la magnitud de la emergencia, todas las actividades en la ciudad fueron suspendidas. En el lugar, se encuentran importantes autoridades nacionales y provinciales, como la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich; el ministro de Defensa, Luis Petri; y el gobernador Axel Kicillof, quienes están supervisando las labores de rescate y asistencia.
En un esfuerzo por facilitar la comunicación durante la emergencia, la municipalidad de Bahía Blanca habilitó el «Bahía Hub», ubicado en la calle Fitz Roy 682, como un punto de recarga de celulares. Este centro estará disponible durante el fin de semana, en un horario de 9:00 a 22:00 horas, para que los ciudadanos puedan mantenerse conectados con sus seres queridos y con los servicios de emergencia.

El caos provocado por el temporal también ha dejado a la ciudad sin suministro eléctrico, lo que ha sumado mayor incertidumbre y preocupación entre los habitantes. La conectividad telefónica y de internet se ha visto seriamente afectada, complicando la comunicación en medio de la tragedia.
Además, las autoridades informaron que se mantiene vigente una alerta amarilla para la ciudad y la región debido a los fuertes vientos, que se suman a las dificultades derivadas de las inundaciones. Los suelos, saturados por las lluvias, se han vuelto inestables, lo que ha provocado la caída de numerosos árboles en las vías públicas. Por este motivo, se instó a la población a mantenerse resguardada y evitar transitar por las calles.
El último parte oficial, emitido a las 17:00 horas, confirmó la muerte de 13 personas, cuyas identidades han sido reveladas. Entre las víctimas fatales se encuentran Maria Isabel Oliva (53), Perla Re, Sara Rueda, Margarita Peusquiza, Elba Ressia, Estela Iturbide (94), Hilda Elvira Pompei (96), Nelson Zinni (48), Sofía González (84), Ortega Rolando, y Nelida Eliseis. Además, la búsqueda de dos menores de edad, Delfina y Pilar Hecker, continúa con la participación de buzos tácticos del Ministerio de Seguridad de la Provincia de Buenos Aires.
En cuanto a la situación de los evacuados, se reporta que aproximadamente 927 personas continúan en los centros de refugio y atención dispuestos por las autoridades. La respuesta ante esta emergencia sigue siendo intensiva, y las tareas de rescate y ayuda humanitaria están en marcha, mientras la ciudad lucha por superar una de las peores tragedias naturales en su historia reciente.