
Son pequeños y sin colmillos, pero extremadamente peludos. Investigadores de la empresa estadounidense Colossal Biosciences lograron modificar genéticamente ratones para que desarrollen un pelaje largo y rizado, similar al del mamut lanudo.
Este avance, basado en la inserción de genes adaptativos al frío, representa un hito en la biotecnología y acerca a los científicos a la posible desextinción del mamut, extinto hace miles de años.
El equipo analizó 121 genomas de mamuts y elefantes modernos para identificar los genes responsables de la resistencia al frío. Utilizando técnicas avanzadas de edición genética, lograron introducir estas características en embriones de ratones, obteniendo ejemplares con un pelaje hasta tres veces más largo que el habitual.
Este experimento demuestra la capacidad de recrear combinaciones genéticas complejas y sugiere que la ingeniería genética no solo podría traer de vuelta especies extintas, sino también aplicarse para ayudar a especies en peligro de extinción, brindándoles adaptaciones clave para sobrevivir a los efectos del cambio climático.
“Es un paso importante hacia la validación de nuestro enfoque para resucitar rasgos que se han perdido por la extinción y que nuestro objetivo es restaurar”, expresó la doctora Beth Shapiro, directora científica de Colossal, en un comunicado de prensa el pasado martes.
Los primeros pasos para recuperar al mamut lanudo comienzan con un ratón:
Ben Lamm, director ejecutivo de Colossal Biosciences, explica cómo la empresa aportó características de mamut lanudo a unos ratones a los que denominan «ratón lanudo».