El mandatario estadounidense emitió un decreto en el que ordena «restaurar» la pena de muerte y pide al fiscal general del país garantizar el suministro de fármacos para las inyecciones letales.
El presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, ordenó este martes que la pena capital se aplique cuando un delito capital federal sea cometido por un extranjero que resida ilegalmente en EE.UU. o en caso de asesinato de un agente de la ley.
El mandatario estadounidense emitió este el lunes un decreto en el que ordena «restaurar» la pena de muerte y pide al fiscal general del país garantizar el suministro de fármacos para las inyecciones letales en los estados en los que se aplica la pena capital.
La orden ejecutiva, compartida en la página oficial de la Casa Blanca, describe a la pena de muerte como una «herramienta esencial para disuadir y castigar a quienes cometen los crímenes más atroces y actos de violencia letal contra los ciudadanos estadounidenses».
Además, el texto recrimina la decisión del expresidente Joe Biden de conmutar las penas de 37 de 40 condenados a muerte, a los que Trump calificó como los «violadores, abusadores de menores y asesinos más viles y sádicos».