María Lourdes Afiuni una jueza que fue condenada torturada y abusada por el régimen de Chávez hasta casi la muerte.
Cuando el 10 de diciembre de 2009 la jueza María Lourdes Afiuni ordenó la libertad bajo fianza del banquero Eligio Cedeño, probablemente no imaginó que pasaría.
“La torturaron tanto que casi muere en su celda si no hubiese sido por una reclusa que avisó que estaba amarilla, sangrando mucho y que no se movía”.
Un caso que resonó fuertemente en su momento por lo atroz que fue y sigue siendo. Para quienes no lo saben, Afiuni era una abogada y jueza, fue presidenta del Tribunal de Control 31 durante 8 años.
Hasta que el 10 de diciembre de 2009 Afiuni ordena la libertad condicional del empresario y banquero venezolano Eligio Cedeño por recomendación de la ONU, que calificó la detención de Cedeño como arbitraria.
Cedeño era acusado por evasión de los controles de divisas CADIVI.
Sin embargo, incumpliendo su libertad condicional Cedeño huye a Miami, y es ahí donde comienza el infierno de Afiuni.
Al enterarse de la huida de Cedeño Chávez arremetió en contra de la jueza pidiendo que se le condenara con la máxima pena ya que según él todo fue planeado.
La palabras de Chávez fueron «Yo exijo dureza contra esa jueza Habrá que meterle pena máxima. ¡30 años de prisión pido!».
«Le dije a la presidenta del Tribunal Supremo, a la Asamblea Nacional, habrá que hacer una ley», dijo Chávez.
María Lourdes Afiuni por su parte se defendió asegurando que solo había ido acuerdo a la ley, que determinaba que ningúna persona debía de estar más de dos años sin sentencia, que de hecho cedeño llevaba 3 años de cárcel preventiva.
No obstante Afiuni fue arrestada por funcionarios del Servicio Bolivariano de Inteligencia Nacional (Sebin). La encarcelaron en el Instituto Nacional de Orientación Femenina (INOF), el mismo centro donde estaban detenidas las mujeres a las que condenó.
Mientras la enjuiciaban sin testigos ni pruebas, Afiuni sufrió varias torturas y violaciones en la cárcel incluso casi le rocían gasolina para quemarla viva; según denunciaron varias veces sus abogados defensores, la habrían intentado «atacar con cuchillos, abusar sexualmente y hasta rociarla con gasolina».
«No hubo semana en la que no me amenazaran», contaría años después la propia jueza.
La torturaron tanto que casi muere en su celda, si no hubiese sido por una reclusa que avisó que estaba amarilla, sangrando mucho y que no se movia tal vez hubiera muerto.
En sus torturas participaron reclusas que negociaron su libertad a cambio de torturarla, las reclusas que le tenían rabia, custodios y empleados del Ministerio de Interior y Justicia, se dice que recibiendo órdenes de superiores.
Afiuni tuvo heridas tan graves que Le reconstruyeron su vagina, ano y vejiga. Le extrajeron el útero, porque aquellas lesiones acabaron en necrosis, también tenía quistes en un seno y una axila.
Ella declaró sus torturas y violaciones, en palabras de la misma María Lourdes Afiuni: «A mí me vaciaron el útero, porque lo tenía vuelto mierda. Pero no contentos con eso, se me destruyó la vejiga, la vagina y el ano. Yo estoy reconstruida», aseguró la exjueza durante una audiencia celebrada en julio de 2015.
«Tengo la cuarta parte del seno comprometida por el coñazo (golpe) que me dieron en el penal con una bota», aseguró también en ese mismo careo.
Debido a su casi muerte y heridas graves y salud delicada, a Afiuni le dieron Cárcel domiciliaria en 2011, un año después de su encarcelamiento injusto aún así tenía una condena de más de 10 años totalmente injusta, en la cual no le permiten siquiera hablar de lo sucedido.
Le cerraron sus cuentas y bloquearon sus números, no puede tener pasaporte ni votar tampoco puede siquiera entrar palacio de justicia, no puede hablar con los medios ni dar entrevistas, ni publicar libros.
Afiuni durante su carcel domiciliaria dió apoyo a la oposición, y habló por los presos políticos lo que causó que al día siguiente en 2019 la volvieran a condenar bajo un cargo de «corrupción espiritual» 5 años más.
La sentencia incluye medidas cautelares que ya pesaban sobre Afiuni, como «prohibición de salida del país, no hablar a la prensa, no hablar en las redes sociales y presentación cada 30 días ante tribunales».
A Afiuni le han preguntado
«Doctora, sigo sin entender a quién le sigue molestando después de tantos años»
Y ella contestó «No lo sé, y si lo supiera tengo prohibición de hablar con medios».
En palabras de su propia madre «mi hija solo cumplió la ley, siguió la recomendación del Grupo de Trabajo sobre la Detención Arbitraria de Naciones Unidas y liberó al señor Eligio. Todavía dicen que ella le cobró por eso, pero está más que demostrado que no lo hizo».
«Mi hija no es una bandida, como dijo Chávez”.
María Lourdes Afiuni hoy en día apoya abiertamente a María Corina, y lucha por los DDHH y los presos políticos, ella siendo el ejemplo de lo que hace el régime, varios mandatarios importantes le han dado su apoyo catalogando su arresto como algo totalmente amañado con zaña.
Hoy en día se conoce como «efecto Afiuni» el hecho de que los jueces estén amañados sea por miedo a que les pase lo mismo que a Afiuni, muchos dicen que ella solo fue un gesto amañado de Chávez para dar el ejemplo de los que les podría pasar a ellos de no hacer lo que el quería.
Con información de la BBC.
