- Al niño lo habían dejado atado a su butaca, con las ventanillas cerradas, y su madre lo encontró desvanecido.
- Dijeron que se olvidaron de llevarlo a la guardería.
- Estuvo internado en terapia y este martes le habían decretado muerte cerebral.
A principios de la semana pasada se conoció que un niño de tres años se encontraba internado en grave estado luego de pasar seis horas en el interior de un vehículo en Neuquén, producto de un olvido de sus padres que se habían ido a trabajar. Desde entonces, la región y también el país se mantuvieron en vilo por su salud, que se agravó severamente este martes hasta tal punto que su condición se declaró como «irreversible». Por la noche, fuentes judiciales confirmaron su muerte.
Todo ocurrió el lunes 11. El niño permaneció sentado en la butaca trasera del vehículo desde las 9 hasta las 15, en la calle Chrestia al 550.
El hombre y la mujer iban al trabajo, en un organismo oficial de Neuquén. Él fue el último en bajarse del auto y cerró la puerta. Adentro quedó su hijo, de 3 años, atado a su butaca y con las ventanillas bajas. Lo encontró su mamá seis horas más tarde, desvanecido y con marcas en la piel. Después de una semana de internación, los médicos declararon que el nene tenía muerte cerebral, y más tarde, la Justicia confirmó que murió.
Según comprobaron las autoridades por las cámaras de seguridad, el padre del niño fue quien lo dejó encerrado para ir a su lugar de trabajo. Su madre lo encontró más tarde con dificultades respiratorias.
En ese momento, la mujer intentó reanimarlo con agua y llamó a la Policía. Lo trasladaron a una clínica privada, donde le brindaron una primera asistencia. Después lo llevaron a otro centro médico, donde se encuentra internado en terapia intensiva. Las marcas en el cuerpo eran por los esfuerzos del menor para desatarse de la butaca.
De acuerdo a lo informado por el coordinador de la Dirección de Seguridad, Alejandro Cares en ese momento, cuándo la mamá regresó al vehículo el pequeño ya estaba «desvanecido» en su interior.
El comisario, en diálogo con AM Cumbre, indicó que hasta el lugar arribó un móvil de Comisaría Primera y Cuarta. «Primero le intentan hacer unas maniobras de reanimación junto a la madre, y luego fue trasladado de urgencia en el móvil», explicó.
Luego de ser trasladado inicialmente a la clínica San Agustín, el nene fue derivado al San Lucas donde permaneció internado hasta este martes, cuando se produjo su deceso. Sus padres, en tanto, mencionaron en sus primeras declaraciones que lo habían olvidado al momento de irse a trabajar a un organismo público, ubicado a pocas cuadras.
De inmediato, se inició una investigación por el hecho, con la participación del Ministerio Público Fiscal de Neuquén y la Defensoría de los Derechos del Niño, Niña y Adolescente.
Con información de Clarin.