Después de cinco años de intensos trabajos de restauración tras el incendio de 2019, la Catedral de Notre Dame está lista para reabrir.

La Catedral de Notre-Dame, uno de los monumentos más emblemáticos de Francia, está a punto de reabrir sus puertas al público tras un largo período de restauración, cinco años después de haber sido devastada por un incendio en abril de 2019. A partir del 8 de diciembre de 2024, los visitantes podrán recorrer nuevamente este icónico edificio, testigo de más de ocho siglos de historia.

El desafío de restaurar Notre-Dame parecía casi imposible cuando las llamas consumieron gran parte de la catedral. Sin embargo, el ambicioso proyecto logró lo impensable. Con el apoyo de miles de artesanos, restauradores y donantes de todo el mundo, la catedral se transformó en un símbolo de resiliencia y unidad, tanto para Francia, como también para el mundo entero.

Desde el devastador incendio que destruyó gran parte del icónico monumento, Notre Dame ha sido sometida a un meticuloso proceso de restauración, con el objetivo de devolverle su esplendor original mientras se incorpora innovación en el diseño. Para ello, el equipo de restauración convocó a diseñadores de renombre como Guillaume Bardet, Ionna Vautrin y Sylvain Dubuisson, quienes han sido responsables de crear piezas clave de mobiliario litúrgico, incluyendo las sillas, el relicario de la Corona de Espinas y otros elementos como el cáliz, el paten y el monasterio. Bardet también diseñó un incensario, una cuenca, un ewer y una bandeja, mientras que los célebres Vincent Dupont-Rougier y Jean-Charles de Castelbajac aportaron sus propios toques, con los primeros creando los candelabros y el segundo diseñando las vestimentas litúrgicas.

Entre los momentos más simbólicos de la restauración se encuentra la restitución de la estatua de la Virgen y el Niño, que sobrevivió milagrosamente al incendio y fue reinstalada dentro de la catedral el mes pasado. Durante la restauración, esta escultura histórica fue cuidadosamente preservada en la iglesia de Saint-Germain-l’Auxerrois, para luego regresar a su lugar de honor en Notre Dame, convirtiéndose en un símbolo de resistencia y renacimiento para el pueblo parisino.

El proceso de restauración no solo se ha centrado en los elementos litúrgicos, sino también en la estructura misma del edificio. Más de 1.300 piedras fueron utilizadas para reconstruir las paredes y bóvedas, mientras que un total de 8.000 tuberías fueron cuidadosamente retiradas, restauradas y reposicionadas a lo largo de la catedral. Como parte de este resurgir, la catedral también ha recibido tres nuevas campanas, y se ha erigido una nueva aguja que vuelve a dominar el skyline parisino, restaurando el perfil arquitectónico de Notre Dame al estado que tantos recordaban.

La reapertura de Notre Dame este fin de semana será un evento de máxima seguridad

La reapertura de Notre Dame este fin de semana será un evento de máxima seguridad, donde se repetirán algunas de las medidas utilizadas durante los Juegos Olímpicos de París y se cerrará el paso a los turistas en la zona donde se encuentra la catedral.

Después cinco años de reconstrucción tras el incendio que devastó Notre Dame en 2019, las ceremonias exclusivas por invitación del sábado y domingo marcarán su renacimiento.

El jefe de policía Laurent Nuñez dijo que solo las personas con invitaciones y los residentes de la isla tendrán acceso a la Île de la Cité en medio del río Sena, que incluye Notre Dame y que habitualmente está llena de turistas.

Mencionó que se espera la asistencia de unos 50 jefes de Estado y de gobierno y que los arreglos de seguridad se basan en las medidas policiales que cerraron grandes secciones del centro de París para la ceremonia de apertura de las Olimpiadas.

“Se aplicará un nivel muy alto de seguridad”, dijo Nuñez en una entrevista publicada el lunes en Le Parisien.

El arzobispo golpeará las puertas

Las celebraciones que comienzan el sábado por la tarde combinarán el ritual religioso y el espectáculo. El arzobispo de París, Laurent Ulrich, presidirá un servicio de reapertura, golpeando con su bastón las puertas cerradas de Notre Dame para reabrirlas, según dice el sitio web de la catedral.

El arzobispo también reactivará simbólicamente el grandioso órgano retumbante de Notre Dame. El incendio que derritió el techo de plomo de la catedral cubrió el enorme instrumento con polvo tóxico. Sus 8.000 tubos, que varían en tamaño desde el de un bolígrafo hasta más de 10 metros de altura, fueron meticulosamente desmontados, limpiados y reajustados.

También habrá salmos, oraciones y cantos. El presidente francés, Emmanuel Macron, asistirá y se dirigirá a los invitados más importantes.

Un espectáculo musical

Después del servicio, los cantantes de ópera Pretty Yende, de Sudáfrica, y Julie Fuchs, de Francia; el pianista chino Lang Lang; el chelista Yo-Yo Ma; la cantante nacida en Benín, Angelique Kidjo; la cantante libanesa Hiba Tawaji y otros actuarán en un concierto el sábado por la noche para la catedral y aquellos que participaron en la reconstrucción, dice el emisor del espectáculo, France Télévisions.

El cordón de seguridad que sellará toda la Île de La Cité, además de un tramo de la orilla sur del Sena y nueve de sus puentes, permanecerá desde el sábado por la tarde hasta el domingo por la noche, dijo el jefe de policía. Solo aquellos involucrados en las ceremonias y los residentes tendrán acceso, agregó. Todas las tiendas en la isla —muchas orientadas al comercio turístico— así como los tours en barco que comienzan y terminan allí no darán servicio el fin de semana, añadió.

Misa dominical y bufé

El arzobispo de París también liderará una misa inaugural y la consagración del nuevo altar el domingo por la mañana.

Casi 170 obispos de Francia y otros países se unirán a la celebración, así como sacerdotes de todas las 106 parroquias de la diócesis de París, dice el sitio web de la catedral.

Se indica que la misa será seguida por un “bufé fraternal” para los necesitados.

Se establecerán áreas de visualización pública capaces de albergar a 40.000 personas en la orilla sur del Sena, para que los espectadores puedan seguir los dos días de eventos en pantallas, dijo el jefe de policía.