El suceso, bastante surrealista, ocurrió en el Juzgado de lo Penal número 6 de Alcalá de Henares, Madrid, España. Fue en una vista por lesiones y amenazas celebrada en septiembre con dos acusados que terminaron sin condena al no haber pruebas contra ellos.
El video ha circulado esta semana por todas la redes sociales. Un hombre se empotra sin mediar palabra contra la pared durante una vista judicial mientras una mujer prestaba declaración. La escena asusta a la señora, llaman a la seguridad de los juzgados y la sala se llena de gente, que se arremolina ante un cuerpo tendido en el suelo. En medio del caos, un abogado se enzarza en una discusión. “La historia tiene mucha trastienda”, advierten a este periódico fuentes jurídicas conocedoras de este juicio, que tuvo lugar en verano en Alcalá de Henares (Madrid). Terminó sin condena para los dos acusados, entre ellos al que llaman ‘el Chalao’.
La sala de vistas corresponde al Juzgado de lo Penal número 6 de Alcalá de Henares y era un juicio por lesiones y amenazas, según detallan a El Confidencial desde el Tribunal Superior de Justicia de Madrid (TSJM). Se sentaban en el banquillo de los acusados ‘el Chalao’ y otro individuo al que apodan ‘el Gordo’. Les había denunciado una pareja de novios que fueron atacados en el mes de mayo en mitad de la calle.
Tras la investigación de los hechos, las víctimas –Estefanía P.S. y Luis M.J.– llegaron a un acuerdo con los acusados y rechazaron seguir adelante con el procedimiento, pero el pacto no incluyó a la Fiscalía, que apostó por seguir acusando a los dos procesados, José Manuel I.L., alias ‘el Gordo’ y Víctor Manuel A.F, alias ‘el Chalao’. Las fuentes consultadas señalan a uno de los abogados de la causa, un letrado muy conocido en los juzgados de Guadalajara y de Alcalá de Henares por “reventar” los juicios. Tanto es así que entre las autoridades judiciales suelen tener prevenidos a los miembros de seguridad cuando este abogado representa a algún cliente, casi siempre delincuentes de baja estofa.
Lo que se ve en el video es la declaración de una señora, que acudió como testigo a la vista. Su testimonio se retrasó porque, según estas fuentes, el citado abogado le dijo por su cuenta y riesgo que no hacía falta que acudiera porque el juicio no se iba a celebrar al haber un acuerdo con los denunciantes. Ni la jueza ni la fiscal estaban al tanto y hubo que llamar a la señora a su casa para que acudiera al juzgado, siempre según las mismas fuentes. En medio de su exposición es cuando el acusado se levantó y corrió contra la pared. Tras el golpe quedó tendido en el suelo.
La intención del gesto era que no se celebrase el juicio, según creen en el juzgado, pero no lograron su objetivo. Además de la seguridad, también llamaron a la médico forense que inspeccionó al individuo y acreditó que su situación no era grave y la vista podía continuar. El juicio terminó y quedó visto para sentencia, que se dictó el 1 de octubre por la magistrada Rosalía Antequera González.
Es una sentencia por un delito de lesiones y otro delito de amenazas. La fiscal pedía para ellos tres años y medio de cárcel por el primer delito y otro año y medio por el segundo. Los dos denunciantes pidieron la libre absolución de los acusados tras renunciar a las acciones emprendidas contra ellos. Según la resolución, el abogado de la acusación parecía el letrado de la defensa. Lo único que consta en el relato de hechos probados de la sentencia a la que ha tenido acceso este periódico es que el 13 de mayo de 2023, a las 14.32 horas, la pareja de novios fue atacada en el parking de un supermercado de Alcalá de Henares. Los agresores portaban una barra metálica y un cuchillo.
«Te voy a matar»
Ella se llevó la peor parte. El hombre que llevaba la barra le golpeó en el antebrazo y en la cabeza. La mujer huyó corriendo de la escena y el agresor salió detrás de ella al grito de “te voy a matar”. Mientras tanto, el otro varón trató de acuchillar varias veces sin éxito al hombre, que se había quedado dentro del vehículo hasta que arrancó y también escapó de la zona. “No ha quedado suficientemente acreditada la participación de José Manuel I.L. y de Víctor Manuel A.F., ambos con antecedentes penales no computables a efectos de reincidencia”, dice la resolución judicial.
En el juicio se revisaron las imágenes captadas por las cámaras de videovigilancia de la zona. En ellas se aprecia con nitidez el asalto, pero no la cara de sus autores. Los policías que también declararon en la vista tampoco fueron capaces de identificar a los acusados porque llegaron al lugar de los hechos cuando ya se habían marchado. Las propias víctimas tampoco declararon contra ‘el Chalao’ y ‘el Gordo’ durante el juicio. La sentencia dice que mostraron una “amnesia selectiva”. Ella, que iba ese día a trabajar al supermercado, comentó que no recordaba el rostro de la persona que le agredió.
La jueza destaca la “palmaria contradicción” de los denunciantes y su “plena convicción de que los testigos han faltado a la verdad”
Esto contrasta con sus declaraciones durante todo el proceso anterior. Los perjudicados sí que identificaron a los dos acusados por su nombre, su apodo y dieron otros datos como “vínculos sociales y cuitas económicas”. En su relato inicial, enmarcaron los hechos en una disputa acaecida dos años antes. Los agredidos habían guardado un dinero a la familia de ‘el Gordo’, pero sufrieron un robo en casa y se lo quitaron. Desde entonces, les persiguen y les amenazan porque les acusan de haberse quedado con el dinero. Según el relato mantenido hasta el juicio, el que portaba el cuchillo era ‘el Chalao’ y el de la barra que agredió a la mujer era ‘el Gordo’.
Pero el día decisivo, en la vista, los denunciantes dejaron de recordar los hechos. Incluso les llegaron a poner frente a los acusados para que les reconocieran, pero no lo hicieron. “Ni me suenan”, dijo él. Ella achacó su versión inicial a los nervios y concluyó que tampoco los conocía. La jueza en su sentencia destaca la “flagrante, grosera y palmaria contradicción” de los denunciantes y su “plena convicción de que los testigos han faltado a la verdad”. Por eso plantea que se emprendan acciones penales contra la pareja por “denuncia falsa” o “falso testimonio”.