Escalofriantes imágenes han emergido tras el devastador ataque con cohetes en la ocupada Donetsk, donde al menos 65 soldados rusos perdieron la vida. El incidente ocurrió cuando las tropas se alinearon en un campo abierto para una inspección de un comandante, según informes de bloggers militares rusos y fuentes ucranianas.
Las impactantes fotografías compartidas en redes sociales muestran un sombrío panorama: cuerpos sin vida de soldados uniformados dispersos en un claro fangoso de un bosque. Los informes indican que entre dos y tres cohetes, fabricados en Estados Unidos (HIMARS), fueron disparados hacia el campo de entrenamiento de la 39ª Brigada de Fusileros Motorizados de Guardias Separados de Rusia, cerca de la aldea ocupada de Trudivske en Donetsk.
Serhiy Bratchuk, portavoz del ejército voluntario del sur de Ucrania, difundió dos vídeos que muestran las «consecuencias» del devastador ataque. Según relató un soldado sobreviviente en un vídeo obtenido por la BBC rusa, las tropas se habían congregado a las 9 de la mañana para una inspección programada del mayor general Oleg Moiseyev, comandante del 29.º ejército de la región militar del Este.
Sin embargo, el mayor general nunca llegó, según informó el corresponsal de guerra ruso Roman Saponkov en Telegram. El blog militar Rybar calificó el evento como «trágico», señalando la falta de sentido común y flexibilidad de pensamiento entre los oficiales superiores.
Hasta el momento, el Ministerio de Defensa de Rusia ha guardado silencio sobre la masacre de sus tropas en Donetsk. La comunidad internacional sigue atenta a los desarrollos en la región, mientras el conflicto entre Ucrania y Rusia continúa generando preocupación por la escalada de violencia y la pérdida de vidas humanas.