julio 6, 2024

El juez de la Corte Suprema de Nueva York, Arthur Engoron, dictaminó que Ivanka Trump, hija del expresidente Donald Trump, deberá testificar en el juicio contra su padre y otros altos ejecutivos de la Organización Trump. A pesar de haber sido inicialmente excluida del caso debido a la prescripción del mismo, el juez Engoron afirmó que su testimonio es esencial para el proceso judicial.

El caso, presentado por la fiscal general de Nueva York, Letitia James, acusa a Donald Trump de inflar artificialmente su patrimonio neto durante una década, desde 2011 hasta 2021. Aunque Ivanka Trump había abandonado la empresa en 2016, se espera que su testimonio, programado para noviembre, arroje luz sobre las prácticas comerciales de la Organización Trump.

Los abogados de Ivanka habían argumentado que ella no era parte en el caso ni residente en Nueva York, pero el juez Engoron desestimó estos argumentos, afirmando que «se ha aprovechado claramente del privilegio de hacer negocios en Nueva York». La decisión ha abierto la puerta para que Ivanka, junto con su padre y hermanos, testifiquen en el juicio que se prevé se extienda hasta diciembre.

El expresidente Trump, quien ha calificado el caso como una «cacería de brujas», ha asistido regularmente al juicio y ha hablado públicamente sobre su inocencia, sosteniendo que las acusaciones son motivadas políticamente. Mientras tanto, los fiscales buscan demostrar que los prestamistas y aseguradoras asumieron riesgos indebidos debido a la supuesta manipulación del patrimonio neto de Trump.

El juicio continúa captando la atención pública y se espera que las próximas semanas estén marcadas por testimonios clave que podrían tener un impacto significativo en el futuro de la Organización Trump y su legado empresarial en Nueva York.